Pasa el tiempo, y el tiempo pasa con nosotros. Hemos terminado los exámenes, y las ganas de disfrutarlo son máximas. Llega los carnavales, y no hay persona que no haya escuchado ya alguna chirigota o comparsa, y me atrevería a decir incluso algún coro o cuarteto. Después tenemos la Semana Santa, ya huele a incienso desde este mismo cuarto en el que estoy escribiendo. Posteriormente, tenemos la feria de Sevilla en abril, y aún no han terminado las fiestas. Y todo esto sin contar las barriladas, fiesta de la primavera, sábados de juerga con los amigos, etc.
El tiempo pasa volando, y cuando nos damos cuenta ya es verano. Y entonces es cuando vamos a disfrutar de los amigos y la familia. Pero para entonces ya habrá pasado demasiado tiempo.
No sé si será el frio que está haciendo estos días, el triste San Valentín de hoy que quita las ganas a cualquiera, que al Barça lo veo más pobre que nunca…, yo que sé, pero no tengo ganas de nada. Lo único que pienso es en tumbarme, dormir, y como no puedo, pues escribir.
Y es verdad que ha pasado mucho tiempo, cierto, más de 4 meses. Un sinfín de frases escritas, muchas palabras pronunciadas y demasiados recuerdos que no van a caer en el olvido. Pero claro, lo contrario sería decir sí a todo, seguir para delante, continuar con todo y estar todos felices. Pero es una felicidad falsa, una felicidad sin rumbo y sin camino que conlleva al fracaso y a la rotura de toda relación. Yo no quiero eso, la felicidad se consigue plena, no a medias. Los juegos son para divertirse, y no para jugar con los sentimientos. Y el amor está para sentirlo y practicarlo, no para despreciarlo.
No queda más remedio que ser positivo, y seguir adelante. Lo bonito queda atrás, en el pasado y en el recuerdo. Nunca podré terminar de dar las gracias por todo aquello vivido y sentido en este tiempo atrás, demasiadas sensaciones nuevas que las quiero guardar en mi baúl, de donde nunca saldrán. Así que vamos a levantar la cabeza, sonreír por el mañana, ser felices por nuestra gran amistad, y sobre todo, por tener una confianza que ya nadie nos puede quitar. Una confianza en la que sólo tú y yo podemos vivir.
{Lazaon}

No hay comentarios:
Publicar un comentario